Getting your Trinity Audio player ready...
|
Índice de contenidos
Uno de los grupos con la vida más difícil de España son los inmigrantes africanos. Ser inmigrante en España o español de origen africano supone un gran reto, sobre todo para los jóvenes de origen africano. La vida para ellos puede resultar muy difícil, ya que la discriminación racial aún es una realidad. Las personas de origen africano en España son víctimas de prejuicios y estereotipos negativos, y en muchos casos, las oportunidades educativas y laborales son limitadas. Para aquellos que buscan empleo, el proceso de búsqueda es a menudo difícil.
Invisibilidad de los africanos en España
Además de la dificultad de encontrar un trabajo adecuado, los jóvenes de origen africano en España enfrentan una serie de problemas que contribuyen a su exclusión social. Estos incluyen el racismo sistémico, el acceso limitado a servicios y educación y la falta de representación en los medios de comunicación. Estos jóvenes a menudo son objeto de abuso verbal y físico, y en muchos casos, la policía los trata de manera injusta. La invisibilidad de los africanos en España es una realidad que ha sido documentada por numerosos estudios. A la hora de hablar de su presencia en este país, suelen faltar estadísticas, informes y datos que permitan tener una visión real de la realidad de esta población.
El descuido de las instituciones hacia ellos se refleja en la falta de políticas específicas para garantizar su inclusión y su desarrollo. Esta invisibilidad se manifiesta también en la escasa presencia de africanos en los medios de comunicación, en los debates políticos y en el debate público en general, a falta de información sobre los problemas que enfrentan, la discriminación y los abusos, la falta de acceso a los servicios de salud, educación y empleo, son algunas de las pruebas.
Sentimiento de desorientación y de frustración
Los jóvenes africanos nacidos en España, se sienten españoles, pero a menudo enfrentan una adversidad mayor que los demás. Muchos de ellos aún tienen que lidiar con el racismo y la discriminación, y el estigma asociado con el hecho de ser africanos. Esta situación los deja en desventaja para lograr sus sueños y metas. Muchos de ellos andan desorientados, buscando respuestas a sus preguntas. Es como si la vida pasara sin ellos. La mayoría se resigna, preguntándose qué les está sucediendo, y es muy probable que terminen dudando de su personalidad. Los más rebeldes se radicalizan en la confrontación al sistema y la denuncia del racismo.
Nunca dudar de su identidad o de tu personalidad
Ante esta situación de adversidad y de negación del otro, lo que debe hacer el joven es no dudar nunca de su personalidad, o de su humanidad. Los africanos somo los progenitores de la humanidad. África es la cuna de las humanidades y de las civilizaciones. El joven africano debe saber que sus antepasados, quienes se adaptaron a las condiciones materiales del Valle del Nilo, son los más antiguos guías de la humanidad en el camino de la civilización; que son ellos quienes crearon las artes, la religión (en particular el monoteísmo), la literatura, los primeros sistemas filosóficos, la escritura, las ciencias exactas (física, matemáticas, mecánica, astronomía, calendario, etc.), la medicina, la arquitectura, la agricultura, etc. en una época en la que el resto de la Tierra estaba sumergido en la barbarie.
Herederos de grandes imperios y civilizaciones
Los jóvenes africanos deben saber que son los herederos de constructores de grandes imperios y civilizaciones como Narmer el primer rey de la historia, las Candaces de Meroe una dinastía de mujeres que gobernaron el antiguo reino de Meroe, Diabe fue el fundador del antiguo Imperio de Ghana, Sundjata Keita, y Sonni Ali. Tambien son herederos los resistentes Béhanzin, Chaka Zulu, Kampa Vita y Ndatte Yallah. Sobre todo son herederos los sabios Ptahhotep, Imhotep o Kagemni. Un legado de grandeza que descubrir. Es importante que sepan que son los herederos de una gran riqueza histórica y sabiduría ancestral. Un legado que les permitirá abrir el camino para construir un futuro mejor para ellos y para su pueblo.
Estudiar mucho para restablecer tu consciencia histórica
Todo lo que deben evitar los jóvenes africanos es evitar de caer en el inmovilismo, la inactividad o el sonambulismo. Esto significa que es nuestra responsabilidad tomar decisiones informadas y conscientes que nos permitan progresar como individuos. Conocer el pasado les ayudará a fortalecer su personalidad para asumir nuevos retos y desafíos. Es importante tomar el tiempo para estudiar los grandes acontecimientos que han moldeado el presente de África. Comprender la historia de la región les ayudará a desarrollar una mayor conciencia y comprensión de sus raíces culturales. Esto les permitirá abordar el futuro con una mayor seguridad, sabiendo que han sido parte de una tradición que se remonta a muchos años atrás.
El autoaprendizaje y el autoempleo como medida
Uno de los métodos que puede usar es el autoaprendizaje. El autoaprendizaje les permitirá tener la independencia intelectual, ya que les da la libertad de investigar, descubrir y experimentar por su cuenta. Les proporciona la oportunidad de adquirir una educación libre de prejuicios y limitaciones, y les da la libertad de aprender de una manera más práctica .
Los mismo que con el autoaprendizaje los jóvenes africanos en España deben fomentar el autoempleo. Esto les permitirá ganar independencia financiera, desarrollar nuevas habilidades y contribuir a la economía de su comunidad. La clave es encontrar una idea innovadora que les permita aprovechar sus fortalezas y habilidades únicas, así como encontrar recursos para financiar su proyecto. Además, también deben buscar apoyo de sus comunidades para obtener asesoramiento y consejos necesarios para hacer crecer su negocio. Con la determinación y el apoyo adecuado, los jóvenes africanos en España están en una posición ideal para convertirse en emprendedores exitosos y fomentar el autoempleo.
Después de la independencia intelectual y económica, con su consciencia histórica restablecida, el joven africano anda libre, consciente de que está viviendo en España pero orgulloso de sus raíces africanas. Dejará de dudar acerca de su identidad, dejará de ser frustrado y dejará de pedir aceptación. Exigirá el respeto a la diferencia y su derecho como ciudadano. A partir de este momento, podrá pararse en cualquier esquina de la calle y gritar «Soy un africano en España».